miércoles, 14 de septiembre de 2011

Cada día nuevas experiencias...

Mientras esperamos siete horas la llegada de la "cabina snet", nos deleitamos experimentando los atributos del parque...



sábado, 10 de septiembre de 2011

Nosotros

Parc Òdena antes y después de la firma

Hola amigos
Algunas fotos de Antonio antes y despúes de la firma!
un fuerte abrazo
Yvonne


Fotos de la primera reunión en el futuro parque (3/9/2011)



¡Cayeron cuatro gotas, para justificar un arco iris y tuvimos un atardecer hermoso!!

martes, 25 de enero de 2011

El saúco, la montaña y objetos encontrados...

(1) "Un árbol donde habitan dioses benéficos, un dragón verde, un báculo y su serpiente, una basílica primitiva y murciélagos ¿qué más?

El viernes 20 de agosto volvimos a la casa de Ódena, lugar donde casi todos (según la última reunión del parque) dijimos era el mejor que habíamos encontrado hasta ese momento y el idóneo para nuestro proyecto del parque de Estudio y Reflexión en Cataluña. En la camioneta en que viajábamos cinco personas mencioné que ya no me referiría a esta casa como “posible futuro parque”, el “presunto parque”, como se hace en el periodismo que por razones judiciales menciona así situaciones que son obvias.

En fin…  ya llegados al parque Ódena nos pusimos a barrer con la escobas nuevecitas que llevó Raúl W., en cierto momento vimos que ya no era oportuno seguir en esta parte de la casa y nos dirigimos a limpiar el “gallinero”, así le nombramos, pero no es exactamente esto, sino una caseta muy bien acondicionada, incluso con calefacción que seguramente sirvió para dormitorio y protección de algunas aves, no sabemos cuales, no hay vestigios, cacas ni plumas por el recinto, una estructura de aproximadamente 10 por 3,50  y 2,50 mts de altura de malla metálica incluso con techo de malla, una gran jaula, que bien puede ser renombrada como “la pajarera”.

 

Los arbustos contiguos entre ellos un rosal silvestre han pasado sus finas ramas por la malla y luego han crecido muchísimo; sobre todo un árbol de vainas coloradas que creemos puede ser un olmo, sus ramas han engrosado y comenzaron a romper la malla de metal, fuimos podando y cortando estas ramas y con el rastrillo fui arrastrando lo cortado hacia una parva que luego llevaríamos al exterior. Me encontraba en este trabajo cuando oigo un golpe metálico del rastrillo contra otro metal,  para mi sorpresa se trata de una vara de metal (bronce) de aproximadamente 50 cm y dije –¡Encontré mi caduceo, el que dejé en Argentina!!!! 

 

 

 

Mi alegría fue mayúscula, me invadió un tren de bellos recuerdos y emociones que intercambiamos con los amigos presentes. 

Seguidamente pedí ayuda –esas ramas de dentro de la caseta hay que sacarlas pero me producen desconfianza ¿alguien se anima a hacerlo?, estaba segura que abajo habría una alimaña, no sabía bien, si araña o serpiente, pero mi intuición era muy clara. Uno de los valientes comenzó a sacarlas hacia fuera y sorpresivamente surgió una culebra, parecía muerta, pero luego comenzó a moverse y levantó la cabeza y nos mostró su poder, tendría más de un metro.

 

Mientras tanto frente a nosotros a unos 70-80 metros Pilar dio un grito de sorpresa; ¿qué habrán descubierto? nos preguntamos y jugamos con imágenes graciosas. En la casa estaba sucediendo algo… Los arquitectos y un grupo se movilizaba hacia otra parte de la casa, nosotros fuimos hacia allí y nos dicen ¡una basílica! ¡Hemos encontrado una basílica!! Rodeamos la casa y entre un follaje muy agreste de zarzas y avispas se descubre una portón caído y un espacio de piedra de unos 10 x 4 metros o incluso más amplio diáfano abovedado ¡un cilindro!! ¿Un granero? ¿Un templo primitivo? Bajo tierra, bajo la casa derruida, pero que sostiene los cuatro arcos (¿las 4 puertas a nuestras cuatro disciplinas?). 


No sabemos que es pero estamos todos extasiados… ¡ya tenemos nuestra Sala!  Estamos conmocionados.

Más tarde Maha me dice:

“Aquí se podrá decir: –no tenemos Sala pero tenemos al mismísimo Silo.”

 

Estamos todos felices ha sido un día de bellísimos descubrimientos: “El poder curativo de este lugar” es indudable para mí, ya se que es una interpretación, quizás para algunas miradas infantil, pero veníamos desde la visita del sábado anterior donde descubrimos el árbol de Saúco (“donde habitan dioses benéficos, de cuya presencia deberíamos alegrarnos”1) y el “Dragón verde protector” 2 (las montañas de detrás de la casa dibujan un dragón acostado) vislumbrando secretos de la casa de Manuel Colom; aquellos del sábado anterior ya eran suficientes, pero estos nuevos hallazgos nos ponen en evidencia de signos de lo Sagrado.

Luego de unos días agrego este recordatorio, ya que varios amigos me hicieron notar que los dejé fuera; y como muchos amigos ya los hemos visto habitan la casa numerosos murciélagos, que incluso me hicieron comentar, “que tendríamos que desalojar a la familia Drakulin…”  Como gran ignorante de este tema me puse a buscar información y encontré muchísima, gran cantidad de datos y mucha mitología5 de diferentes pueblos…

(2) "El árbol Saúco y el Dragón verde"

1. Saúco “…el hombre se ha valido del saúco desde la edad de piedra, como alimento, medicina, en ritos religiosos y mágicos, como planta de jardín, para fabricar silbatos valiéndose de su madera hueca, etc…”

 “Según viejas creencias, en el saúco habitan dioses benéficos de cuya presencia deberíamos alegrarnos. Cada año, en primavera, las flores blanco amarillentas del saúco y su intenso aroma seducen a los excursionistas; cada otoño cubre el suelo con un jugo entre negro y violeta, conforme sus bayas maduras empiezan a caer.

Los principios activos de las flores –sobre todo, los aceites esenciales y los flavonoides y, en segundo lugar los minerales y las vitaminas- tienen efectos muy beneficiosos sobre el sistema inmunológico, sobre todo para combatir los catarros y la gripe. Al igual que la infusión de flores de tilo, la de flores de saúco se puede tomar para lograr una buena transpiración.

Además facilita la expulsión de mucosidad y atenúa las molestias en caso de fiebre y resfriado.”

“El aceite del árbol del té” de Sven-Jörg Buslau & Gisela Schreiber. Ediciones Obelisco 2002

 

 

 

2. “El dragón verde, cuyas colinas aportan abundancia y prosperidad.” La escuela de las formas en el feng shui de Lillian Too Edaf Madrid 1997.



 

Sobre el “Dragón” también dice Juan-Eduardo Cirlot, en su Diccionario de Símbolos; recordando que tenemos un dragón acostado, “el dragón genérico chino simboliza la pervensión sublimada y superada, pues implícitamente, se trata de un “dragón domado”, como el que obedece a San Jorge después de haber sido derrotado. También tiene una profunda y total significación cósmica, simboliza la “vida rítmica”…

(3) “El báculo o caduceo y la serpiente”

3. En la Mitologí­a griega, Asclepius (Esculapio, para los romanos), hijo de Apolo, fue adorado como el Dios de la Medicina. Su madre, Coronis, una princesa de Tesalia, murió cuando él era chico.
Apolo hizo que fuera educado por Chiron, un centauro versado en medicina y en el conocimiento de las plantas medicinales, enseñó a Asclepius las Artes de la curación. Cuando hubo crecido logró dominar la cirugí­a, la terapia con plantas y, además, resucitaba a los muertos.
Un dí­a en casa de Glauco, gravemente enfermo, observó que una serpiente se acerca peligrosamente a su amigo y con un bastón la mata. Inmediatamente, otra serpiente con unas hierbas en la boca resucita a su compañera muerta. Con estas hierbas, Esculapio resucita a los muertos, provocando una crisis demográfica en la Tierra y despoblando el Ades.
Ades, el hermano infernal de Zeus también se queja y el dios del rayo y del trueno no tiene mas remedio que tomar una medida ejemplificadora, fulminar al osado médico y elevarlo al rango de constelación en la de Ofiuco (cuidador de serpientes).
Desde entonces Asclepius, es venerado como el dios de la medicina y se representa con un báculo o vara de ciprés y la serpiente. La vara de ciprés o báculo es la fortaleza y la solidez ética en la que se apoya el médico y es a la vez un instrumento de unión entre el cielo y la tierra.
La serpiente, que representa el misterio de la vida y de la muerte, en suma la sabidurí­a, la prudencia y la prevención, tres atributos de un buen médico. Fortaleza ética y sabidurí­a, báculo y serpiente para ayudar al médico en los procesos curativos.
Entre los vástagos de Esculapio o Asclepius los más famosos fueron sus hijas Hygeia (la Salud) y Panacea (la Cura), y su hijo Telesforo o Acesios (genio de la convalecencia). Se lo representa acompañado por sus hijos o también con un gallo a los pies y una culebra enroscada en el brazo. El Templo de Esculapio, levantado en su honor en el siglo IV a C, llega a su apogeo en el siglo II dC, pues Galeno ejerció allí­ su profesión.

Más mitología sobre el caduceo
Hermes o Mercurio, era conocido en Egipto como el Dios de Cabeza de Ibis (Thot) simbolizando el ave del principio de trascendencia; y en Grecia era representado como falo y con serpientes entrelazadas (acto de unión sexual), por lo que penetra en el mundo desconocido buscando un mensaje espiritual de liberación y curación. Así, Hermes recuperó atributos de la vida de las aves que agregó a su naturaleza tectónica de serpiente adquiriendo su cayado alas por encima de las serpientes convirtiéndose en caduceo o bastón alado de Mercurio y se convirtió en “hombre volador” con sombrero y sandalias con alas, que de la conciencia-serpiente del mundo inferior, pasando por la realidad terrena, alcanza la realidad sobrehumana o transpersonal en su vuelo alado.
Por otra parte, Esculapio era hijo de la luz, de la razón, de la vida; pero también es una deidad tectónica, que proviene de la tierra, del inframundo, en suma, de la muerte; situándose la medicina entre la vida y la muerte, y de ahí la necesidad de su resolución por la vía de la ética médica…

El culto a la serpiente
Desde tiempo inmemorial el hombre ha sentido temor y fascinación ante la serpiente. Al observar la vida de este misterioso reptil y ver como adquiere nueva vida en la primavera, cambiando completamente su piel todos los años, se asoció a la serpiente las ideas de sabiduría, rejuvenecimiento, fertilidad, salud y prosperidad.
Los aztecas, indios orientales, cretenses y fenicios, rindieron culto a la serpiente como uno de sus dioses. Los indios de América reverenciaron a la serpiente de cascabel; los budistas, a la cobra; y los babilónicos, al pitón (dragón monstruoso, hijo de la tierra).
En las excavaciones realizadas en Canaán, Gezer y otros lugares de las antiguas civilizaciones se han encontrado serpientes de bronce y de piedra.
 Asimismo, las divinidades egipcias - Ra y Osiris- y los faraones ostentaban emblemas de serpientes en sus cofias y tocados. En cambio, el dragón era el símbolo del Imperio Chino.

Según algunos autores, la costumbre de venerar la serpiente data de 3000 a de J. C., cuando la estrella Alpha Draconis de la Constelación Draco era la Estrella Polar, que se consideraba muy importante para determinar el sino del hombre. Incluso en la Biblia aparece este juicio: “Y Moisés hizo una serpiente de bronce y la colocó sobre el polo. Y cuando una serpiente atacaba a un hombre, si éste contemplaba la serpiente metálica, no moría”.
Del culto a la serpiente surgieron dos símbolos: el caduceo y la vara o bastón de Esculapio; los dos incluyen una vara, que según diversas opiniones representa una varita mágica, un báculo, una cayada de pastor o un símbolo fálico. Generalmente se considera que significa el árbol de la vida, pero todo esto pertenece a la mitología.

Finalmente sobre el “báculo” también dice Juan-Eduardo Cirlot, en su Diccionario de símbolos; “símbolo de la fe, por el significado de lo sigmoideo representa el poder divino, la comunicación y la conexión…” y sobre “caduceo” “desde el punto de vista esotérico, la vara del caduceo corresponde al eje del mundo y sus serpientes aluden a la fuerza Kundalini, que según las enseñanzas tántricas, permanece dormida y enroscada sobre sí misma en la base de la columna vertebral (símbolo de la facultad evolutiva de la energía pura)…” y mucho más muy interesante.

4. Basílica. Originalmente con el nombre de basílica se conocía a ciertos majestuosos edificios paganos convertidos en Iglesias.

5. “El consejo de Ciento de Barcelona tomó como divina al murciélago para simbolizar su unión, mutua fuerza y vigilancia aludiendo a la costumbre que tienen estos animales de pegarse o unirse los unos a los otros formando largas cadenas, de los que salen durante la noche para sus correrías. Es muy posible que el murciélago tenga su origen en los dragones, los cuales eran usados por anteriores reyes de Aragón, en una leyenda de San Jorge que fue traída de las cruzadas, en la cual venció a un temible dragón para salvar a una doncella. Entonces era la figura de un dragón la que había en las cimeras de los yelmos. Con el paso del tiempo, el dragón dejó paso a un elegante murciélago, pero con la Inquisición volvió a convertirse en una figura demoniaca…”

“Los indigenas Koguis (Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia) tienen mucho aprecio por los murciélagos. Esta cultura ve a la noche y a la oscuridad como un tiempo de gran valor espiritual, sus hombres sabios, llamados "mamos", son preparados en el interior de cuevas. Por eso al murciélago le tienen varias distinciones, es un animal "mamo" pues es nocturno y vive en cuevas, son seres muy inteligentes, "duermen cabeza abajo" y eso demuestra que son los únicos que saben que este mundo está al revés!. Hay una historia que pertenece una etnia indígena que está a punto de desaparecer:…” 
  
Las fotografías fueron tomadas por: Raúl Woo, Toni Gil, Guillem de Riba y LedaA.